zymbolo

Cada hombre y cada mujer es una estrella.

A su alrededor las órbitas, interactúan con los demás:
Danzan, se precipitan, se influencian.

Cada cual con sus ciclos, regidos en tiempo y espacio
por la gravedad universal.

Si es verdadera la voluntad,
aparece la inercia,
y lleva, y lleva.

Se precipitan, se influencian, 
chocan planetas, 
se eclipsan o se alinean.
Se van. 
Se vuelven a encontrar.
Soltar.


Cada hombre y cada mujer quiere ser lo que realmente es.

Si la voluntad es la verdadera,
el espíritu se alegra,
y crea, y crea.